La violencia que padece actualmente la población mexicana se traduce en un problema de seguridad pública, y ha adquirido dimensiones materiales y emocionales. Los factores determinantes de la creciente inseguridad que vivimos los mexicanos son de diversa naturaleza y abarcan el campo de acción de distintas disciplinas. A ello se debe que su conocimiento sistemático se convierta en una necesidad prioritaria para la sociedad mexicana.
En México podemos traducir como resultado de conductas delictivas la impunidad, el soborno, el crimen organizado y el vandalismo que amenaza con la integridad individual y colectiva.
La violencia social y sus diversas manifestaciones suceden en un contexto histórico-social y su causalidad es de origen multidisciplinario, por lo que es necesario para estudiar la violencia, especificar el área de conocimiento que se trate:
• Perspectiva jurídica: la violencia se asocia con transgresión a la ley y los acontecimientos violentos se enmarcan en los hechos criminales.
• Perspectiva psicológica: la violencia es un mecanismo inherente al aparato psíquico al procurar deshacerse de aquello que lo perturba.
La corrupción forma parte indisoluble de las estrategias globales del crimen organizado, y en muchos casos de las estructuras financieras mismas de gran número de países de primer mundo.
A diferencia de otras épocas, los medios de comunicación tienen un papel clave en la difusión de los hechos relacionados con la violencia y en la mayoría de los casos pueden influir en la percepción del público receptor. Se ha detectado el incremento de la violencia urbana en sus múltiples manifestaciones: robo, homicidio, lesiones, amenazas y violaciones.
El estudio de la violencia en México tiene un elemento común: la dificultad para poder realizar análisis de tipo cualitativo y cuantitativo, asi como la carencia de información confiable.
Está comprobado que los ciudadanos viven constantemente con el temor de ser víctimas de delito,( definiendo miedo al delito como el sentimiento de inseguridad general que padece la población.), esto es un factor que opera negativamente contra la información oficial en cuanto a índices delictivos se refiere, lo que ocasiona que las estadísticas con las que contamos, sean aún menos confiables, ya sea por :
• Temor a represalia
• Desconfianza en las autoridades
• La pérdida de tiempo que implica realizar la denuncia
• Evitar ser sujetos a chantajes o corrupción
• Considerar que el daño fue irrelevante…..
La seguridad es una condición humana indispensable que permite la sobrevivencia de los
ciudadanos y a la cual las sociedades han respondido al generar mecanismos
institucionales para salvaguardarla.
La ausencia de denuncias ciudadanas genera la “cifra negra” u oculta de la criminalidad, y tal desconocimiento dificulta la planeación de estrategias para combatir la delincuencia.
El temor a ser víctima de un delito ha llevado a tomar precauciones a 97 % de los victimizados y a 98% de los que no, a continuación se muestra gráficamente lo anterior:
La percepción de la seguridad pública a nivel nacional y Valle de México muestra que las medidas de prevención que ha tomado la gente son mayores entre las personas que no han sido víctimas de delitos.
En general los principales hábitos que se han dejado de realizar son:
• Llevar dinero en efectivo
• Usar joyas
• Salir de noche.
